Haciendo un poco de historia, la tilapia fue introducida a territorio colombiano en el año 1956 procedente Brasil (cepa originaria de Jamaica) y luego reintroducida en la década de 1960 con cepas provenientes de los Estados Unidos. Gracias a la gran variedad de climas y ambientes ideales para su explotación, la tilapia fue adquiriendo cada vez más popularidad entre los piscicultores hasta ser hoy en día el pescado más producido en el país, por delante de la trucha arcoíris.
La tilapia ha adquirido tal importancia en Colombia, que se ha convertido en el principal factor de crecimiento de la acuicultura nacional creciendo anualmente más del 9%. Sin ir más lejos, entre el 2017 y el 2018 las exportaciones de Tilapia aumentaron de 41 millones a 55 millones de dólares, y en el año 2018 la capacidad productora formal de tilapia del país aumento en 4200 toneladas y se estima que el volumen de producción informal creció de manera similar. El año pasado Colombia se posicionó como el mayor exportador de tilapia a los Estados Unidos con un total de ventas que rondó los 55 millones de dólares, desplazando a Honduras, y es actualmente el segundo mayor productor de este pez a nivel sudamericano por detrás de Brasil con un volumen promedio cercano a las 85 mil toneladas anuales. Los principales mercados destino de la tilapia colombiana son Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y Alemania. Sin embargo, gracias al constante impulso de la actividad, ProColombia, la entidad exportadora nacional, apunta a los mercados europeos (Bélgica, España Francia), asiáticos (Hong Kong, Corea del Sur), sudamericanos (Perú, Chile) y algunos mercados exóticos como Sudáfrica y Singapur. De hecho, en 2018 se llevó a cabo la primera exportación de tilapia colombiana a Islandia, a través de Costco Gran Bretaña. Según expertos, las exportaciones proyectadas para el sector acuícola colombiano superarían los 80 millones de dólares en este 2019.
El centro neurálgico de la producción, se encuentra en la represa de Betania, en el departamento del Huila, en donde se produce más del 46% del volumen total. En el mismo departamento se encuentran además los 5 mayores productores del país, quienes concentran el 80% de las exportaciones de tilapia en sus distintas presentaciones. Cada empresa se ha centrado en un punto de entrada específico en Estados Unidos, es así como esta estrategia facilita la sana competencia por los distintos nichos de mercado, desembarcando sus productos en Miami, Los Angeles y Nueva York, desde donde posteriormente son distribuidos a lo largo y ancho del país. Adicionalmente, en la misma región del Huila se encuentran tres de las únicas cinco plantas de proceso con habilitación y capacidad exportadora del país, de hecho, esto es actualmente lo único que separa la tilapia colombiana del resto del mundo, ya que si tuvieran mayor cantidad de plantas de proceso habilitadas para exportar los niveles de ventas al exterior crecerían inmensamente.
Gracias a la cercanía con el mercado americano, el principal producto de exportación es el filete fresco de tilapia negra, lo que representa además “la gran ventaja” con respeto a sus competidores que deben enviar sus productos congelados. Los costos de producción son relativamente bajos debido a las técnicas de cultivo más utilizadas (balsas flotantes y estanques en tierra) y el precio del alimento concentrado que se produce de manera local. El costo por kilo de pescado entero ronda los 1,5 USD, y el filete puede alcanzar un costo total de 2,35USD/Kg. En menor cantidad también la tilapia roja fresca es comercializada entera sobre todo en los mercados de Centro y Sudamérica (México, Panamá, Perú, Ecuador) con un costo de producción que rondaría los 1,45USD/Kg en su presentación eviscerada en tamaño plato (1lb).
Una de las más importantes ventajas con las que cuenta la industria de la tilapia en Colombia sobre las demás actividades acuícola-pesqueras, es que cuenta con entidades gubernamentales y privadas que apoyan al desarrollo de la misma, siendo que emplea a más de 10.000 personas directamente y otras miles más en actividades relacionadas. Por ejemplo, en lo que va del año, ya se han realizado tres distintas capacitaciones para los productores de tilapia del país en sanidad y bioseguridad, nuevas tecnologías y normatividad. así como también ProColombia llevó consigo a los importadores más importantes del país al Seafood Expo Global en Brusselas, celebrado el pasado mes de mayo, en busca de nuevos potenciales compradores para la tilapia y la trucha colombiana. Sin dudas, el gobierno del país ve con muy buenos ojos el futuro de la acuicultura nacional, impulsada siempre por la tilapia a la cabeza.