La pregunta es, ¿dentro de veinte años tendrá el mundo suficiente pescado para alimentar a nuestra creciente población? – «No si ese pez proviene de la pesca de bancos naturales. Los cientos de millones de toneladas de peces adicionales que necesitaremos provendrán de las piscifactorias». (Profesor de Acuicultura y Pesca Johan Verreth, de la Universidad de Wageningen & Research).
En los últimos años, la sostenibilidad se ha convertido en una de las palabras más repetidas y usadas en todo el mundo. Pero, si observamos la forma en que hemos tratado a nuestro planeta y las consecuencias que surgirán de nuestras acciones, podemos ver que nuestro futuro y el futuro de las próximas generaciones parece ser bastante aterrador. En algunos casos, el futuro está sucediendo ahora mismo.
¿Qué significa la sostenibilidad?
El ser sostenible es simplemente utilizar los recursos que tenemos a nuestra disposición y dejar que vuelvan a crecer o a regenerarse para que no agotar su stock de manera definitiva. Estos recursos satisfacen nuestras necesidades, pero si los llevamos a la extinción, dichas necesidades se verán comprometidas seriamente y crearemos una reacción en cadena en todo el ecosistema a nivel planetario. Nuestros océanos son conocidos hoy en día como la «gran sopa de plástico», y los animales marinos, incluidos los que consumimos, se comen ese plástico, si a esto le sumamos el hecho de que las poblaciones de peces están desapareciendo debido a la explotación masiva de la pesca, nos encontramos ante una grave situación. Desde la década de 1980, las pesquerías mundiales mantuvieron una tasa de captura de alrededor de 90 millones de toneladas. Estas ridículas estadísticas están borrando la mayor parte de la vida marina a un ritmo más rápido del que la vida marina se puede recuperar. Las poblaciones de peces se están reduciendo ya que no tienen tiempo suficiente para madurar y reproducirse. A nadie sorprende que en este momento alrededor del 30% de todas las poblaciones de peces marinos se consideren capturadas a niveles de no retorno.
¿Por qué la tilapia es una solución sostenible?
La cría de peces que consumimos y que provienen de la acuicultura, se convirtió en una alternativa vital para la pesca en mar abierto, ya que nos proporciona un colosal 50% de todos los productos que se consumen en el mundo. La tilapia hace una gran parte de ese porcentaje, de hecho, es el segundo pescado más consumido y su producción ha aumentado exponencialmente con los años. Es considerado uno de los peces más importantes en la acuicultura, y suministra al mundo más de 1,5 millones de toneladas métricas por año. Esto es posible debido a la capacidad de tilapia para crecer en diferentes condiciones y prosperar hasta en los sistemas menos favorables. Además, el consumo de pescado representa un elemento nutricional clave para más del 70% de la población mundial, que vive junto al mar o que se basa en la proteína de pescado como su alimento básico.
La tilapia cultivada no solo se considera beneficiosa para nuestra salud, sino que además crea un impacto positivo en el medio ambiente, en un momento crucial en el que muchas poblaciones marinas se están agotando a un ritmo imperdonable.
